8/10
Es un hotel muy bonito pegado a la muralla. Con terraza (cubierta) y bar y restaurante. Las habitaciones son modernos pero con detalles conservados de la antigüedad como las vigas y algunas paredes de piedra y adoquín. Lo único que en nuestro baño, al ducharnos por la mañana, los pequeños azulejos del suelo se despegaban por lo que molestaba al pisar. Se aconseja coger parking para el coche ya que aparcar cerca del hotel es complicado. Todo lo demás perfecto.
Rene
Viaje de 1 noche