8/10
Muy aislado, muy relajante, habitaciones sencillas pero cómodas. Para llegar hay que ir a pie por un camino con subida y bajada alrededor de un kilómetro desde la estación de tren de Myrdal. El hotel tiene su propia estación para viajar en el tren de Fläm. En verano, hay una tirolina que discurre por encima del valle
Luis César
Viaje de 2 noches