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Nos gustó mucho estar en el North Forty Resort. La cabaña está muy bien dotada, tiene chimenea que regula la temperatura. Tiene un jacuzzi al aire libre con calefacción y con vista al bosque. Cuenta con lavadoras y secadores, lo cual es muy útil. Las personas de las recepción son muy amables. El hotel queda cerca de Whitefish que es un pueblo muy bonito, con mucha vida de restaurantes, y además tiene un lago maravilloso para deportes acuáticos. También queda muy cerca de la entrada al Parque Nacional de los Glaciares. Un lugar muy recomendado. Con seguridad volveremos.
Maria Alejandra
Viaje de 1 noche en familia