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Llegamos y no tenían nuestra reservación contemplada. La habitación estaba un poco anticuada pero limpia, el AC hacía mucho ruido y preferimos pender los ventiladores de techo (que también hacían ruido pero un poco menos), no hay televisión en la habitación, solo dejaron amenidades de baño para 1 persona y la reserva era para 3, el personal del bar no es muy servicial teníamos que salir de la alberca e ir por nuestras bebidas nosotros mismos, por el contrario, las chicas del restaurante (las hermanas) eran muy amables y siempre atendían con una sonrisa.
Me dedico a la hotelería y sé que con un buen servicio y una habitación limpia y cómoda puedes tener a tus huéspedes felices, sin embargo el hecho de llegar y que no esté nuestra habitación y el mal servicio del personal del bar me dejó un mal sabor de boca.
Solo regresaría por la tranquilidad del lugar y la vista que tiene.
Vanessa
Viaje de 1 noche en familia
