Los 10 mejores parques de Chicago

Lincoln Park es el parque más grande de la ciudad y se extiende más de 10 km a lo largo de la costa del lago Míchigan. Tiene jardines, lagunas, estanques con lirios acuáticos, un zoológico, playas, un sendero frente al lago y varios museos. El tamaño de este parque es realmente impresionante. Es incluso más grande que el Central Park en la ciudad de Nueva York.

El zoológico de Lincoln Park, fundado en 1868, es uno de los más antiguos del país. Este lugar de acceso gratuito es el hogar de más de 200 especies, incluidos leones, monos y osos, y su misión es conectar a las personas con la naturaleza. Después de explorar el zoológico, dirígete al invernadero para descubrir exquisitas plantas exóticas y orquídeas raras.

Si bien el Grant Park se encuentra en el distrito financiero de Chicago, este parque recibe a visitantes de todo tipo. En las instalaciones se incluyen un área de patinaje, campos de beisbol y canchas de pickleball. Las personas que pasan por aquí se sienten atraídas por la cultura del Instituto de Arte de Chicago, el Museo Field de Historia Natural, el Shedd Aquarium y el Planetario Adler.

La pieza central del parque es la Fuente de Buckingham, que presenta exhibiciones de agua cada 20 minutos de mayo a octubre, con una espectacular exhibición de luces entre las 21:00 y las 22:00. Los eventos anuales que se celebran en el anfiteatro Petrillo Music Shell del parque incluyen el tranquilo Chicago Jazz Festival, el delicioso festival gastronómico Taste of Chicago y el espectáculo musical anual Lollapalooza.

El Millennium Park alberga uno de los símbolos más emblemáticos (e instagrameables) de Chicago: Cloud Gate, el enorme "frijol" plateado de Anish Kapoor. Con un peso de más de 110 toneladas, la brillante escultura refleja el horizonte de la "Ciudad de los vientos". Seguro verás a varios visitantes que pasan por debajo de esta obra de 10 m de altura.

Refréscate en la Fuente Crown interactiva, que tiene una pared de video que proyecta los rostros de 1,000 ciudadanos que representan la diversa población de Chicago. El Puente BP de Frank Gehry es otro ejemplo de arte basado tanto en el diseño como en la practicidad dentro del parque. Se trata de una pasarela peatonal accesible revestida de acero inoxidable cepillado que conecta con el Grant Park. Gehry también diseñó el futurista Pabellón Jay Pritzker, donde se llevan a cabo espectáculos culturales gratuitos en el Great Lawn, con capacidad para 10,000 personas.

McKinley Park abrió sus puertas en 1901, un mes después del asesinato del presidente William McKinley. Algunos funcionarios visionarios del departamento de parques de Chicago decidieron construir un parque en su honor. Los parques anteriores estaban lejos de las zonas de viviendas superpobladas de la ciudad; McKinley Park adquirió importancia nacional, lo que abrió el camino para futuros espacios verdes en áreas desfavorecidas.

Hoy en día, los visitantes pueden dar un paseo por el área natural, observar aves en los grandes humedales, refrescarse en el parque acuático ideal para niños y conocer la estatua conmemorativa de William McKinley en la sección superior izquierda del parque. El sitio está adaptado para personas en silla de ruedas.

El Humboldt Park, que lleva el nombre del pionero explorador, científico y ecólogo Alexander Von Humboldt, es un vibrante parque de 80 hectáreas al oeste de la ciudad. Además, tiene una gran estatua en homenaje a este naturalista berlinés. Los fanáticos del deporte pueden visitar la histórica casa de campo, que contiene un centro de fitness y dos gimnasios. Para divertirte en familia, puedes ir al lago con botes, a los campos de beisbol y a la playa interior.

El parque también alberga con orgullo el National Museum of Puerto Rican Arts and Culture en los antiguos establos completamente renovados. Se trata del único museo del país dedicado exclusivamente a la historia de las artes y tradiciones culturales puertorriqueñas.

Si estás buscando un paseo por la naturaleza que también te permita contemplar los rascacielos, dirígete a Northerly Island Park. Las personas que visiten este parque ubicado a orillas del lago Míchigan pueden disfrutar de un paseo a pie o en bicicleta por el sendero accesible de concreto para pasar por lagunas, hábitats de vida silvestre ideales para observar aves, áreas de pesca y juegos para los niños.

Al sur del Planetario Adler, encontrarás la playa 12th Street Beach, con estacionamiento, acceso a deportes acuáticos, alimentos, bebidas y baños. También hay un paseo accesible junto a la playa si no tienes ganas de tomar el sol.

Ubicado dentro de un rectángulo perfecto entre los rascacielos del centro de Chicago, Lakeshore East Park se siente como un refugio dentro de la ciudad, con sus jardines formales cuidados a la perfección. A principios de la primavera, estos jardines exhiben miles de bulbos de tulipanes.

Si llevas a tu amigo de cuatro patas de vacaciones, Lakeshore East Park es el lugar ideal para que los perros pasen un rato de diversión. Hay 4 hectáreas a lo largo del extremo sur del parque que permiten a los propietarios dar rienda suelta a sus mascotas entre terrenos ajardinados a la sombra de los árboles, e incluso hay una fuente de agua para que los perritos se refresquen. Para los niños, hay una divertida función para rociar agua y un colorido parque infantil.

Al oeste de la ciudad, Marquette Park es el parque más grande creado para las zonas de inmigrantes y desfavorecidos de la ciudad, y se llama así por un misionero y explorador jesuita francés, Jacques Marquette. Este plan pionero de principios del siglo XX tenía como objetivo crear lindos jardines o "espacios para respirar" para las áreas congestionadas y sobrepobladas.

Hoy en día, el parque tiene una escultura al aire libre que rinde homenaje a Martin Luther King, quien encabezó una marcha en Marquette Park en protesta contra las prácticas injustas en materia de vivienda. Con áreas de conservación y lagunas para explorar, también hay muchas actividades para los amantes de la naturaleza y los deportes, como canchas de basquetbol, un campo de prácticas, un área de pesca y una casa de campo accesible.

Ubicado en la vibrante comunidad de Pilsen, en el oeste de Chicago, Harrison Park les da a los lugareños acceso a canchas de pickleball, campos de futbol y beisbol, y una alberca techada bastante visitada. El área que rodea el parque es rica en cultura latina, con murales de arte callejero para explorar y comida callejera mexicana para comer.

El Museo Nacional de Arte Mexicano, de entrada gratuita, se encuentra en el interior del parque. La misión del museo es representar a la comunidad mexicana con una colección permanente de arte, textiles, grabados, fotografías y programas de artes escénicas.

Otro de los parques de Chicago con una rica historia es el Henry C. Palmisano Nature Park. Antes se lo conocía formalmente como Stearns Quarry, y de aquí se obtuvo roca para construir el canal Illinois y Míchigan. Se convirtió en un vertedero en la década de 1970. Permaneció así hasta que unos urbanistas emprendedores se hicieron cargo en 2009 y construyeron uno de los parques más interesantes de Chicago para los afortunados residentes de Bridgeport.

Las paredes de la cantera se conservaron para formar humedales escalonados que llevan a un estanque de pesca; además, hay unos 3 km de malecón de madera reciclada para caminar por la naturaleza con una increíble vista del paisaje urbano de fondo. En un pasado aún más lejano, el área era un arrecife de coral, por lo que podrías pescar un fósil o dos.