10/10
Es un lugar increíble, maravilloso y paradisíaco. La naturaleza en su esplendor. El checkin cálido, eficiente y amable. El servicio de restaurante espectacular y cortés. La señorita que nos atendió el sábado 17, nos explicó la naturaleza de los alimentos y nos recomendó brillantemente. Deliciosa la comida. Yucateca. Ella misma nos atendió en la cena de la noche del sábado 17. Nuevas recomendaciones y mezcla de sabores impresionantes. Lo mejor es la atención de ella. El lugar se presta para pasar el tiempo ahí. Hay música en vivo "ad hoc" para el tipo de huéspedes. Hasta nks animamos a bailar una salsa y algo de reggé. Cerraron alrededor de las diez y media de la noche y nosotros nos quedamos hasta la una de la mañana disfrutando el área llena de árboles y sillas y mesas cómodas. El desayuno del domingo también fue espectacular. Optamos por el desayuno americano incluido en nuestra reservación. Completo, sabroso. Hay brunch buffet. Era mucho para nosotros pero se veía delicioso con todas las opciones. En este desayuno nos atendió otra señora que nos comentó que era la supervisora del resto de meseros y que ella nos había servido nuestras bebidas la noche anterior y nos vio bailar. Que mujer tan agradable, De verdad hace sentir al huésped como alguien importante. Estamos invitados a volver
Víctor M
Viaje de 1 noche